Los hidroceles son comunes en los bebés recién nacidos.
Durante el desarrollo de un bebé en el útero, los testículos descienden desde el abdomen a través de un conducto hasta el escroto. Los hidroceles se presentan cuando este conducto no se cierra. El líquido drena desde el abdomen a través del conducto abierto y queda atrapado en el escroto. Esto hace que el escroto se hinche.
La mayoría de los hidroceles desaparecen unos cuantos meses después del nacimiento. Algunas veces, un hidrocele puede ocurrir con una hernia inguinal.